La Asociación de Industriales Pesqueros ha alabado en reiteradas oportunidades los beneficios que opina trajo el sistema de cuotas.
Definitivamente la Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes) quiere que el gobierno asuma el mensaje que ha estado enviando respecto de algo que ven como necesidad para concretar las inversiones que les permitan reconstruir el sector devastado por el terremoto y maremoto: que se adelante el debate del marco legal que les regula, la Ley de Límites Máximos de Captura por Armador (LMC) que rige hasta 2012.
Ello, luego que, como indicó la entidad a través de un comunicado de prensa ayer, "ha tomado conocimiento de las declaraciones del subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, en el sentido que el gobierno ha decidido posponer el proyecto de ley para discutir la renovación de los LMC".
No obstante, "Asipes recalca que ha informado al gobierno respecto de los graves problemas ocurridos producto del terremoto y posterior maremoto en la Región del Bío Bío y, especialmente, en la zona del borde costero, donde se encuentra ubicada la industria pesquera", dice la declaración agregando que las empresas socias tienen 14 plantas destruidas y 5.500 personas con contratos de trabajo realizando labores no productivas. Los daños infraestructurales ascienden a 300 millones de dólares, los ocasionados por pérdidas de stock y cese de operaciones suman cerca de US$ 450 millones, y retomar la capacidad de producción existente antes de la catástrofe natural demoraría 18 meses".
Finalizó con que "ante las declaraciones del subsecretario, las compañías administrarán en la forma que le sea posible la difícil situación que atraviesan, intentando minimizar los costos para el sector, los trabajadores, pescadores artesanales, y la región en su conjunto".
En el debate están participando varias voces. Una es la del senador Alejandro Navarro que reiteró ayer que "no hay que prorrogar la ley, si no que anticipar el debate sobre esa norma, para no esperar que lleguemos al 2012 a legislar bajo presión, como ocurrió la vez pasada".
Los pescadores artesanales también participan en la discusión. La Confepach no quiere que se anticipe el debate oficial aunque ya le preocupa que se hable de licitar cuotas. A la otra gran organización artesanal, la Conapach le inquieta, entre otras cuestiones la distribución de cuotas entre sectores.