Pesquera Landes comenzó ayer a desvincular a poco más del 60% de sus trabajadores, de un total de 630 que componían su dotación antes del terremoto y tsunami del 27 de febrero.
Andrés Fosk, gerente Comercial de la empresa recordó que los fenómenos naturales provocaron la destrucción total de sus instalaciones productivas en isla Rocuant de Talcahuano. "Las pérdidas económicas de la compañía son millonarias. Además de ellas, hay un daño difícil de cuantificar para su futuro inmediato y la dolorosa pérdida de fuentes laborales directas en su operación en la ciudad", comentó a El Sur.
Agregó que "pese a que el Código del trabajo, establece en su artículo 159 número 6, que las empresas pueden despedir a sus trabajadores sin pago e indemnización alguna, por motivo de fuerza mayor, derivada de una catástrofe como la que nos afectó, la compañía, sin embargo, ha tomado la decisión de entregar una indemnización voluntariamente a sus trabajadores para paliar parcialmente este doloroso proceso".
Los porcentajes de indemnización son variables y se están negociando caso a caso.
El ejecutivo reiteró lo manifestado a días del terremoto en el sentido que refundarán la compañía en Talcahuano, donde están hace más de 50 años. Los tiempos para ello son largos, no acotados todavía, pero se ha hablado de un año, plazo que varía según la planta o línea de proceso.