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La tragedia del norte, con 33 mineros atrapados en el yacimiento San José, por más de dos semanas, develó una serie de irregularidades no sólo en el funcionamiento de la empresa, sino en varias reparticiones públicas que debieron fiscalizar las condiciones de seguridad que existían para realizar las faenas.
Si bien el Presidente Piñera ha sido categórico en señalar que la prioridad es el rescate de los mineros, para lo cual ha desplegado todos los esfuerzos necesarios, en estos días ha dado pasos sustantivos para resolver el problema de fondo en varias direcciones, partiendo por destituir a la dirección del Sernageomin, que permitió la reapertura de la mina. Asimismo, ha advertido que se establecerán las responsabilidades privadas y públicas en el accidente y se procederá a una profunda reformulación del sistema laboral.
“Si queremos ser un país desarrollado de verdad no basta con crecimiento económico e inversión, tenemos que respetar la dignidad y, sobre todo, darle seguridad y proteger la vida de nuestros trabajadores”, dijo ayer el Mandatario, junto con informar que dio un plazo de 90 días al Ministerio del Trabajo para elaborar una propuesta integral sobre protección a los trabajadores en todas las actividades económicas, en especial en la minería, construcción, transportes y agricultura. En esa línea, el Jefe de Estado dijo que se revisarán íntegramente la legislación, los reglamentos, la capacidad de fiscalización y las sanciones que existen para asegurar condiciones de trabajo que no arriesguen la vida de las personas.
El compromiso del Presidente va acompañado de acciones inmediatas, como ha demostrado en estos escasos meses que lleva gobernando. En contrapartida, la Concertación que manejó el poder por 20 años, desplegó una agenda laboral para sacar provecho político pero, como quedó demostrado, fue incapaz de crear equipos profesionales que fiscalizaran y aseguraran condiciones básicas para el desempeño laboral.
Si bien el Presidente Piñera ha sido categórico en señalar que la prioridad es el rescate de los mineros, para lo cual ha desplegado todos los esfuerzos necesarios, en estos días ha dado pasos sustantivos para resolver el problema de fondo en varias direcciones, partiendo por destituir a la dirección del Sernageomin, que permitió la reapertura de la mina. Asimismo, ha advertido que se establecerán las responsabilidades privadas y públicas en el accidente y se procederá a una profunda reformulación del sistema laboral.
“Si queremos ser un país desarrollado de verdad no basta con crecimiento económico e inversión, tenemos que respetar la dignidad y, sobre todo, darle seguridad y proteger la vida de nuestros trabajadores”, dijo ayer el Mandatario, junto con informar que dio un plazo de 90 días al Ministerio del Trabajo para elaborar una propuesta integral sobre protección a los trabajadores en todas las actividades económicas, en especial en la minería, construcción, transportes y agricultura. En esa línea, el Jefe de Estado dijo que se revisarán íntegramente la legislación, los reglamentos, la capacidad de fiscalización y las sanciones que existen para asegurar condiciones de trabajo que no arriesguen la vida de las personas.
El compromiso del Presidente va acompañado de acciones inmediatas, como ha demostrado en estos escasos meses que lleva gobernando. En contrapartida, la Concertación que manejó el poder por 20 años, desplegó una agenda laboral para sacar provecho político pero, como quedó demostrado, fue incapaz de crear equipos profesionales que fiscalizaran y aseguraran condiciones básicas para el desempeño laboral.
