"Fetrapes" fiscalía nacional económica no resuelve colusión en licitaciones pesquera, efecto ley longueira

TLC que se esperan el 2008 y que podrían beneficiar a la industria pesquera

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Australia, Vietnam, Turquía y Malasia, son los principales países con los que Chile priorizará las conversaciones dirigidas a la firma de tratados de libre comercio en 2008, los que se unirán a los más de 50 TLC suscritos por el país en los últimos años. Ello permitirá profundizar más aún las relaciones comerciales de Chile con Asia y Oceanía, donde ya se poseen un tratado comercial vigente con Nueva Zelandia, Singapur y Brunei, Corea del Sur, además de los TLC que se firmaron con China, Japón y un acuerdo de alcance parcial con India; como también con el sureste de Europa, Rusia y Medio Oriente de concretarse un acuerdo con Turquía.
Otras intenciones mencionadas para este año son el concretar una profundización del Tratado vigente con Estados Unidos, como también las negociaciones sobre los servicios financieros con México.
Australia
Uno de los más comentados en el último tiempo es el que Chile negocia con Australia, con el cual la idea es ir más allá de un acuerdo de intercambio de bienes y beneficios arancelarios, vale decir, alcanzar alianzas estratégicas para genera nuevos negocios, simplificar regulaciones, estandarizar procedimientos aduaneros y fortalecer áreas de investigación y desarrollo. Pero en lo concreto, hay algo más de fondo y es que firmar este TLC permitirá seguir complementando la estrategia de convertir a Chile en plataforma de negocios e inversiones en la región y complementar las alianzas estratégicas en Asia y Oceanía.
Australia, además es un mercado atractivo que tiene una población de 20,7 millones de habitantes, y cuenta con un ingreso per cápita de US$ 36.500, y al igual que Chile ha firmado una serie de acuerdos de libre comercio, entre ellos Nueva Zelandia, Estados Unidos, entre otros, y negocia otros con China y Japón, informó la Estrategia.
En términos comerciales, los bienes más favorecidos respecto a las importaciones desde Australia serán el carbón, maquinaria industrial, planchas de acero, máquinas para limpiar y clasificar frutas, mientras que en términos de las exportaciones chilenas a ese país destacan la celulosa, servicios, madera manufacturada y explosivos para la minería. Cabe destacar que los envíos a Australia se elevaron considerablemente en 2007, toda vez que en enero-noviembre totalizaron US$ 268,7 millones, más del doble que lo computado en iguales meses de 2006.
Vietnam
Otras conversaciones que se priorizarán este año serán las dirigidas a la firma de un TLC con Vietnam y que también debieran potenciar la apuesta chilena de transformarse en la puerta de entrada a América Latina de productos del Asia Pacífico. Igualmente para Chile, Vietnam es un potencial mercado para los productos nacionales debido a la gran densidad poblacional (78 millones de habitantes), sus altas tasas de crecimiento promedio, y su proceso de cambio económico que ha generado un aumento en el poder de compra de sus ciudadanos y aún le restaría mucho por subir.
En los últimos años (entre 2003 y 2006) el comercio entre Chile y Vietnam creció rápidamente, a una tasa anual de 50%, aunque en 2007, el ritmo bajó considerablemente (6%), totalizando US$ 152,5 millones.
Las principales áreas de interés común entre ambas naciones son el sector minería, forestal, agrícola y científico-tecnológico, mientras que los productos más exportados por Chile a ese mercado son cobre, vino y frutas. Al respecto, las recomendaciones de expertos para enfrentar ese mercado apuntan a que la oferta exportable chilena debería orientarse al sector alimenticio, bebidas y licores, productos del mar y forestales y servicios, en tanto, que los bajos niveles de desarrollo aún predominantes en Vietnam facilitan la exportación de muchos productos del sector industrial.
Las principales importaciones chilenas desde ese mercado, por su parte, corresponden a textiles, calzados, equipos electrónicos y arroz.
Turquía
También un positivo impacto en las relaciones económicas y comerciales tendría un TLC entre Chile y Turquía, pues permitiría la eliminación y rebaja de las tarifas arancelarias lo que elevará más aún el comercio bilateral. En efecto, en los últimos años, el intercambio comercial ha evolucionado crecientemente, pasando de US $37 millones en 1997, hasta US$ 445 millones en 2006. Incluso en el año 2007 se verificó un impresionante incremento, llegando a un récord de US$ 1.278 millones en los primeros once meses del año, el triple de lo acumulado a noviembre de 2006. Destacó, especialmente el extraordinario aumento anotado por las importaciones desde ese país, las que subieron 24 veces en doce meses.
Turquía es un país industrializado, con empresas modernas, alta tecnología, competitivo internacionalmente y que constituye una puerta de acceso al Sur Este de Europa, Rusia y también al Medio Oriente.
Entre los productos exportados por Chile con mayor participación se encuentran: cátodos y secciones de cátodos de cobre refinado; pasta química de coníferas; pasta química de madera distinta a las coníferas; nitrato de potasio; y los demás fungicidas. Mientras que entre los productos más importados desde Turquía figuran: barras de hierro sin alear; los demás radiadores y sus partes; automóviles de turismo; carbonato de calcio, y partes de calderas de vapor.
Malasia
Otro TLC esperado es el con Malasia, país con el que se iniciaron negociaciones en abril de 2007 y donde también busca que Chile sea su puerta de ingreso a Sudamérica, pues es el primer país de la región con el que ese mercado estrecha vínculos comerciales, entregando una buena oportunidad para la estrategia de Chile como país plataforma. Nuestro país, además aumentaría más aún su presencia en el sudeste asiático y específicamente será un paso más del proceso de acercamiento con ASEAN, bloque de diez países del sudeste asiático, que según expertos jugará un rol comercial de gran importancia en el mundial durante este siglo y es estratégico para el papel de Chile en el comercio mundial.
Malasia en un país con una economía similar a la chilena en tamaño y complementaria en relación a los principales rubros de producción. Su población asciende a 24 millones habitantes, presenta un Producto Bruto Interno de alrededor de US$ 147.000 millones, y un ingreso per cápita que bordea los US$ 5.000. Los productos chilenos más apetecidos en ese mercado son los pellets de hierro, cobre y en menor medida celulosa, moluscos e invertebrados acuáticos, uvas y cajas de cambio de automóviles. Los bienes más importados desde ese país, en tanto, son computadores digital portátil de peso igual o menor a 10 kilos, teléfonos celulares y de otras redes inalámbricas, muebles de madera y otros aparatos de conexión.
El intercambio comercial entre ambos países llegó a US$ 230 millones en los primeros once meses del año pasado, sin embargo, ello implicó una disminución de 15% respecto a doce meses antes, debido a la moderación de las exportaciones chilenas. Desde la década del noventa se ha mantenido una situación de déficit comercial para Chile, que a noviembre último alcanzó a US$ 87 millones.

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