No es fácil hablar de la jibia. Pocos conocen sus propiedades alimenticias, por lo que nunca se ha fomentado su consumo masivo. Por el contrario, es vista como una plaga, pues este molusco actualmente está invadiendo las costas chilenas devorándose los peces que tradicionalmente son el sustento del sector, como la merluza.
Pero todo problema presenta una oportunidad. Y es que la jibia comienza a ganar terreno como un bien exportable.
De acuerdo con el diario Estrategia, esta tendencia se explica por sus cualidades nutricionales, tiene sabor similar al apetecido loco y un menor precio. "Este producto no sólo es sano y bajo en calorías, tan presentes en nuestra época, sino que además es muy barato. Estas son características claves que hacen que el consumo del producto vaya en aumento", sostuvo Claudia Salazar, sales manager de Intermark Ltda. / Artic S.A.
Ante esto, nuestro país presenta varias ventajas para aprovechar esta oportunidad. A juicio de Héctor Bacigalupo, gerente general de Sonapesca, la jibia no sólo es un producto masivo en nuestras costas, sino que gracias a su costo pueden realizarse subproductos. "Un año hubo tanta jibia (300 mil t) que se ocupó mucho para hacer harina de este molusco. Esto a raíz de que no existían mercados ni procesos de exportación de jibia congelada".
Pero eso ya quedó atrás. Según un informe de la Aduana chilena, la jibia se exporta ya sea viva, fresca, refrigerada o bien congelada. Si bien el 2006 la primera mostró una variación de un 259%, la mayor demanda se da en los envíos congelados.
Nuestro país presenta incipientes exportaciones. En 2004 los envíos de este calamar rojo llegaron a 15 mil t, el 2005 a 18 mil t y el 2006 a 16 mil t, mostrando un aumento de 6,7% en dos años. Los montos embarcados en 2004 ascendían a US$ 8 millones, mientras que el año pasado totalizaron US$ 9,7 millones.
Potencialidades
Claudia Salazar afirmó que los potenciales mercados están en el Asia. De hecho, Bacigalupo resaltó que los principales destinos de exportación de este molusco el 2006 fueron China, envíos de US$ 3,6 millones; seguido por Corea del Sur US$ 1,7 millón, y Filipinas, con US$ 1 millón. Entre los tres sumaron 10.833 t llegando a US$ 6,3 millones, representando el 65% del total embarcado ese año.
Según un informe de ProChile las exportaciones entre enero y agosto de 2007 muestran que el principal mercado de jibia congelada sigue siendo China, con un monto de US$ 1,5 millón.
Un punto a favor para el país es la ventaja arancelaria producto de los acuerdos comerciales. La jibia enviada desde Chile a China ingresa con un 8% de arancel, pero el calendario de desgravación acordado entre ambas naciones implica que al 2015 este molusco llegará con 0%; mientras que con Corea del Sur antes del TLC la tarifa era 20%, hoy es 0%. Filipinas, en tanto, con quien no tenemos acuerdo, exige un impuesto de 10%.
No obstante, Salazar considera que América Latina también brinda oportunidades para este producto, particularmente por su bajo costo. Prueba de ello es que las exportaciones frescas o vivas de jibia a Venezuela crecieron 65% entre enero y agosto de este año, comparado con igual periodo de 2006, alcanzando US$ 4,4 millones y un volumen de 509 mil t.