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Si bien las grandes compañías del sector pesquero que cuentan con operaciones en la industria acuícola salmonera reconocen el renacer que está mostrando esta última actividad, la delicada situación por la que atraviesan las principales pesquerías pelágicas y demersales del país no les permite sacar cuentas alegres a partir de esta mejor situación.
Explican que los activos que se utilizan para una y otra actividad no son posibles reconvertirlos y, por lo tanto, no permiten lograr una sinergia entre ambos negocios, aunque admiten que entrega una mayor estabilidad a las empresas.
Rodrigo Sarquis, presidente de Sonapesca y vicepresidente de Pesquera Itata, afirmó categórico que entre el negocio pesquero y acuícola "no se producen sinergias, quizás, salvo en la gerencia, administración y venta".
Explicó que toda la capacidad instalada que tiene la pesca extractiva está orientada a los recursos pelágicos y demersales, por ende, "que se recupere la industria del salmón no significa que las plantas nuestras van a tener un uso alternativo.
No son plantas que estén preparadas para poder procesar salmones o truchas", indicó.Los pesqueros industriales enfrentan uno de los escenarios más complejos de los últimos años, toda vez que la principal pesquería del país, el jurel, registra niveles de captura que están por debajo del 50% respecto años anteriores. En ese sentido, Sarquis dijo que el auge que se está viendo en el sector salmonero "no tienen nada que ver, ni tampoco va palear, desde mi perspectiva, la delicada situación por la que está atravesando la industria pelágica". No obstante, reconoció que el fortalecimiento del negocio acuícola, que han anunciado varias compañías de este sector, y en las que se incluye a Salmones Itata, "permite disponer de una posibilidad para incursionar en otro negocio".
Visión de El Golfo
A su turno, el gerente general de Pesquera El Golfo, Alberto Romero, indicó que si bien la incursión en el sector salmonero le otorga una mayor fuente de estabilidad a una empresa, "un mejor momento del sector , no te ayuda a salvar la situación que se enfrenta con los problemas del jurel".
Sin embargo, apuntó que en el caso de esta compañía, reconvirtieron el 50% de una planta para procesar merluza a salmón, "pero no es la regla general y tampoco para el caso del jurel", advirtió. Con todo, los pesqueros confían en que los cambios que se estudian a la normativa del sector permitan ayudar a soslayar esta situación.
