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Entre el 15 de agosto y el 20 de septiembre no se puede pescar merluza común (Merluccius gayi gayi) en Chile, puesto que en esta fecha el pez demersal se acerca a aguas menos profundas y próximas a la costa para reproducirse.
Según lo informado por el Diario de Concepción, la prohibición se impuso hace tres años, luego que la Subsecretaría de Pesca (Subpesca) constatara la ostensible disminución de los desembarques de la tradicional "pescada" a raíz de la plaga de jibias que llegó en 2003 desde latitudes tropicales.
Sin embargo, desde que comenzó a regir la medida, la Coordinadora de Defensa de la Pesca Artesanal ha presionado a la autoridad para que les permita pescar durante la veda biológica, aduciendo razones sociales.
Este año no fue la excepción. Cristian Miranda, quien lidera la agrupación en San Antonio, celebró el fin de semana la resolución 2139 que permite pescar merluza a las embarcaciones que utilicen enmalle, espinel o línea de mano: "Esta veda representa una ventanita de esperanza para nosotros, tiene un fin social".
Queja de los industriales
Las lanchas artesanales podrán capturar mil 500 kilos diarios de merluza y los botes 600. Los industriales están molestos con la noticia, y no porque sus barcos de arrastre queden fuera del beneficio de la pesca de investigación, sino precisamente porque consideran que este "subterfugio legal" es altamente nocivo para el recurso.
Hace poco más de un mes, el presidente de la Federación de Tripulantes de Chile (Fetrinech), Sergio Vera, ya advertía lo nefasto de la medida: "Del 15 de agosto al 20 de septiembre el recurso se acerca a la costa a desovar y no queremos que lo capturen. Mucha gente se alegra que le vendan pescados con huevos; gustan mucho, ¿pero se dan cuenta que así están matando el futuro?".
Vera dijo entonces que la baja en los desembarques de merluza no sólo afectaba a los artesanales, como dice Miranda: "Tenemos gente desempleada, familias desechas; no son sólo los artesanales los afectados. En el sector se han invertido más de $ 5.000 millones, pero están igual que como empezaron. La plata se ha asignado a ayudas mensuales, canastas familiares. Además, si hay gente que está recibiendo ayuda mensual, no es justo que además sea autorizado a pescar cuando hay veda biológica".
Por lo mismo, los industriales creen que al igual que durante las vedas anteriores, los artesanales saldrán a decir que su mayor desembarque es producto de la ausencia de los barcos de arrastre, cuando en verdad la concentración de ejemplares maduros se debe a la etapa de desove.
Trayectoria de declive
Este año, la cuota global autorizada de pesca de merluza es de 55 mil t, cifra un 12% menor que la del 2007, cuando la extracción permitida fue de 62 mil 100 t.
La extracción de merluza ha caído sostenidamente en los últimos años, producto de la plaga de jibias que trajo el Fenómeno El Niño en el 2003 y que inusualmente se ha mantenido en nuestras aguas.
Prueba de ello son los datos del Servicio Nacional de Pesca sobre desembarque artesanal de jibia y merluza en la V Región, que expuso hace unos días el centro de estudios Libertad y Desarrollo en su informe "Pesca de arrastre: una propuesta inconveniente", en el que critica la moción parlamentaria que pretende declarar ilegal este arte de pesca.
Según el documento, entre el 2002 y 2006, la extracción del calamar rojo aumentó de cerca de 300 t a casi 10 mil, mientras el desembarque de merluza descendió de casi 8 mil t a cerca de 2 mil en igual período.
