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Noticia publicada el: 23/08/2007
Medidas concretas y urgentes, tales como subsidios directos para ir en ayuda de las cientos de familias de pescadores artesanales exigieron al Gobierno los senadores Jorge Arancibia y Nelson Ávila, integrantes de la Comisión de Pesca, ante la crisis que vive la merluza (Merluccius gayi gayi), principal pesquería de la zona central.
El senador Jorge Arancibia afirmó que "el origen del actual conflicto social que viven los artesanales se produce por la ausencia del producto y eso se debe a la sobreexplotación que sufrió la merluza" y agregó que "por lo tanto, hay que fijar una veda al producto para que se pueda recuperar y mientras eso se aplica, ciertamente el Gobierno tiene que implementar un subsidio para paliar una cesantía que fue provocada por una mala administración".
En tanto, el senador Nelson Ávila coincidió con su par en el sentido de que "es el Estado el tiene que hacerse cargo de las políticas erradas que ha implementado en el sector. La denominada ley corta de pesca ha producido una devastación en los recursos marinos porque prácticamente todas las especies se encuentran colapsadas".
Añadió que, "en el caso de la merluza es dramático porque se está vendiendo la de un tamaño similar a los pejerreyes. Eso muestra que se están extrayendo las especies juveniles con lo cual sólo vamos a producir el exterminio completo" y concluyó que "lamentablemente, nuestra legislación en vez de hacer primar el principio precautorio se ha privilegiado el beneficio económico de corto plazo. La pesca artesanal corresponde históricamente a la gente que da vida al borde costero desde Arica a Punta Arenas y si se termina el producto con el cual abastecen a la población y sobreviven ellos mismos vamos a tener una situación social absolutamente explosiva y ya estamos viendo algunos síntomas de ese problema".
El senador Jorge Arancibia afirmó que "el origen del actual conflicto social que viven los artesanales se produce por la ausencia del producto y eso se debe a la sobreexplotación que sufrió la merluza" y agregó que "por lo tanto, hay que fijar una veda al producto para que se pueda recuperar y mientras eso se aplica, ciertamente el Gobierno tiene que implementar un subsidio para paliar una cesantía que fue provocada por una mala administración".
En tanto, el senador Nelson Ávila coincidió con su par en el sentido de que "es el Estado el tiene que hacerse cargo de las políticas erradas que ha implementado en el sector. La denominada ley corta de pesca ha producido una devastación en los recursos marinos porque prácticamente todas las especies se encuentran colapsadas".
Añadió que, "en el caso de la merluza es dramático porque se está vendiendo la de un tamaño similar a los pejerreyes. Eso muestra que se están extrayendo las especies juveniles con lo cual sólo vamos a producir el exterminio completo" y concluyó que "lamentablemente, nuestra legislación en vez de hacer primar el principio precautorio se ha privilegiado el beneficio económico de corto plazo. La pesca artesanal corresponde históricamente a la gente que da vida al borde costero desde Arica a Punta Arenas y si se termina el producto con el cual abastecen a la población y sobreviven ellos mismos vamos a tener una situación social absolutamente explosiva y ya estamos viendo algunos síntomas de ese problema".
