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Un ferviente llamado a proteger los recursos marinos realizaron las Organizaciones Medioambientales y de Conservación (ECO, por su nombre en inglés) de Nueva Zelanda, a los delegados que están participando en la última ronda de negociaciones para establecer una Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (ORP), en Auckland (Nueva Zelanda), y donde nuestro país también asiste.
"Si no se detienen inmediatamente las capturas de jurel, entonces las medidas que se adopten serán para administrar a peces fantasmas, ya que estos habrán desaparecido antes de que la ORP comience a operar", afirmó el economista de ECO, Cath Wallace.
El profesional añadió que el Comité Científico de la naciente ORP ha aconsejado que la pesca de jurel debe reducirse, ya que en la actualidad las capturas están por sobre lo que el stock de esta especie puede resistir.
Además, grupos medioambientales han manifestado su preocupación sobre lo que está sucediendo en Auckland, la misma inquietud manifestada el martes por la Sociedad Nacional de Pesca, ya que en vez de acordar limitar las capturas y el esfuerzo pesquero, algunos países están bloqueando este tipo de medidas y han propuesto incluso un mayor número de barcos para realizar labores de pesca.
"Perú ha aprobado una ley que permite a barcos pesqueros -que se sabe que son ilegales- a capturar en su nombre. Esto es una tentativa de aumentar sus capturas históricas para así obtener futuras asignaciones", afirma Wallace.
La Comisión Europea, Perú, Corea, China y Rusia están impidiendo la introducción de límites de captura o medidas efectivas de conservación. "Una lista que está circulando en los pasillos de la conferencia y que manifiesta la ampliación de la participación de buques de pesca en el Pacífico Sur sería suficiente para depredar las reservas pesqueras de jurel", comentaron.
